Camina hacia el tiempo
donde todo eran recuerdos,
donde tú eras mi amigo
y todos buenos momentos.
Camina hacia el pasado
donde todo era sagrado,
donde cada gesto era un milagro
y nada quedaba en vano.
Freno hacia un presente,
en el que solo me encuentro ausente.
Ya solo me siento diferente,
y a tu lado, vacío de mente.
Nadie aquí ha fallado,
en eso es en lo que nos hemos equivocado,
nadie es culpable del curioso destino
que hace que cojamos caminos diferentes.
Os culpe por cambiar,
por no entender vuestra mentalidad,
por llegar a ver como lo absurdo
rozaba lo incoherente de la irrealidad.
Al no quererme concienciar
de que todos llegamos a cambiar,
me resigne al llanto por perder.
Lagrimas, símbolos de resignación
sin caer en la sencilla razón...Solo cambie yo.
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